Con la pandemia de COVID-19 los servicios religiosos han tenido que tener modificaciones, tal es el caso de los bautizos.
Por ello un sacerdote decidió implementar una peculiar estrategia para bautizar a un pequeño en una iglesia de Brownsville, en Texas.
El padre utilizó una pistola de agua mientras los padres sostenían al pequeño.
En la misma se puede observar al clérigo con cubrebocas y pistola de agua apuntando a un bebé que está a más de dos metros de distancia.
La fotografía se ha vuelto una sensación y hasta tiene varios montajes que la misma gente del Internet ha creado.